Es el cristal del poder y la prosperidad.

 

Posee un color amarillo dorado, atrayente y profundo.

 

No en vano, el amarillo es el color que representa la energía del Sol,

 

Favorece la intelectualidad, el razonamiento y el optimismo.

 

Potencia la voluntad personal.

El cuarzo citrino tiene una muy poderosa vibración.

 

Es uno de los pocos cristales que no hace falta limpiar.

 

Genera calidez.

 

Es el donante de fuerza por excelencia.

 

Fomenta la alegría de vivir.

 

Con la energía solar tan potente del citrino, la persona es capaz de digerir la vida -en su doble vertiente de emociones y sentimientos-, y los alimentos.

Es excelente para tratar la digestión y el tránsito intestinal. Invierte el proceso de las enfermedades degenerativas y es muy eficaz para el síndrome de fatiga crónica.

Es también un cuarzo de prosperidad, de abundancia.

 

Se conoce al citrino como “la piedra feliz y generosa“.

 

Atrae todo tipo de cosas buenas y hace que fluya el dinero.

 

Coloca el citrino en la esquina izquierda más alejada de la puerta principal de tu casa.