Una de las virtudes naturales de este mineral es la amplificación energética.

Cuando un rayo de luz sale de este cristal y toca un chakra o un punto energético en el cuerpo áurico, aumenta la actividad del mismo.

Por eso en Gemoterapia se lo utiliza como un potenciador de las energías de las otras piedras curativas, y también para alinear los centros de energía, llevando la luz de un cuerpo a otro.

Ayuda a superar estados de ansiedad

Similar al rutilado, encontramos en el cristal de roca y el cuarzo lechoso cristales de turmalina, que potencian los efectos de estas gemas.

El cuarzo turmalinado sirve para eliminar casi todas las variedades de energías negativas sutiles o físicas. Desbloquea los chakras.

Suele trabajarse junto con el cuarzo transparente

Aúna las propiedades del cuarzo y la turmalina.

Es eficaz para enraizar

Fortalece el campo energético corporal ante la invasión externa

Desvía las influencias medioambientales negativas

Disuelve los patrones cristalizados

 

Libera tensiones a todos los niveles

Armoniza los elementos dispares y opuestos

Armoniza las polaridades

Convierte los pensamientos y energías negativos en positivos

Ayuda a integrar y sanar las energías de la sombra, aliviando el auto sabotaje

Es eficaz en la resolución de problemas

Armoniza los meridianos

Armoniza los cuerpos sutiles

Armoniza los chacras.